Natos y Waor hacen historia ante 60.000 fieles en Madrid.
· Los raperos ofrecen su show más trabajado, exitoso y brillante hasta la fecha en el Estadio Riyadh Air Metropolitano con un repertorio de tres horas de duración y casi 20 amigos invitados a la fiesta.
Por fin llegó el día en el que la dupla formada por Gonzalo Cidre “Natos” (Buenos Aires, 14 de octubre de 1991) y Fernando Hisado “Waor” (Madrid, 28 de mayo de 1988) salió a escena en el mastodóntico escenario comandado por unas gigantescas pantallas en el Riyadh Air Metropolitano de Madrid. En la cita, histórica en la escena musical nacional, los raperos ratificaron lo que llevan mostrando y demostrando desde hace quince años: no hay ni habrá un grupo de hip hop (o rap, o urbana o como quiera llamarse) igual que ellos.
En lo que a cifras se refiere, ahora que todo se basa en números en plataformas de streaming, seguidores en redes sociales, likes, reels y demás pantomimas digitales, la pareja agotó el papel congregando a 60.000 espectadores llegados de todas partes (era la única fecha en directo en nuestro país en todo el año), ofreciendo un estudiado, trabajado y logrado show durante tres horas de duración, interpretando más de 40 canciones y contando con casi 20 invitados sobre el escenario (curioso que sólo uno de esos invitados fuese una mujer, Naiara, ganadora de la duodécima edición de Operación Triunfo).

Celebrando sus tres lustros en activo, la etapa comprendida entre el año 2010 y el presente 2025, Gonzalo y Fernando tiraron la casa por la ventana con la producción del show, repleta de luces, pantallas, láser, fuego, petardos y hasta fuegos artificiales, todo un montaje a la altura de la noche que quedará en la memoria de los presentes toda la vida. Tanto en los que estaban sobre el escenario, que radiaron felicidad durante 180 minutos, como los que abarrotaron gradas y pista festejando el acontecimiento con cerveza, tabaco, drogas y móviles en alto durante toda la velada.
En los primeros compases de la tarde salieron a por todas, echando mano de algunas de las canciones más cañeras de su repertorio como son ‘Piratas’ y ‘Camarón’, para enlazar las mismas con la aparición del rapero Costa, encapuchado, con quien compartieron ‘Rockandrollas’ y ‘Demonios y bares’. Tras el polémico vocalista se sucedieron sobre el escenario Iván Cano, Dave, Chamán, Al Safir e Israel B, con quienes compartieron rimas, cánticos, abrazos, vítores y aplausos por parte de un respetable totalmente desatado. Mientras sonaba el tema ‘Martes 13’, aparecieron los problemas técnicos en la microfonía sufridos por Natos, pero Waor supo remontar lanzando uno de los muchos speech de la jornada.

La primera hora del show pasó deprisa, saliendo entonces a escena su colega, hermano y compañero de fatigas Jorge Escorial, el tercer hijo de la ruina en discordia junto a Gon y Fer. El conocido trío calavera, bautizado musicalmente como Hijos de la Ruina, golpeó fuerte con casi una docena de canciones (‘Carretera’, ‘Delirium’, ‘Hasta que salga el sol’, ‘Sudores fríos’…), aprovechando el intenso bloque para anunciar el cuarto volumen compartido entre Natos, Waor y Recycled J después de sus tres primeras referencias. Además del emotivo momento, el trío de artistas anunció que habrá gira el año que viene por toda la Península, con fechas confirmadas en grandes recintos de Sevilla, Zaragoza, Madrid, A Coruña, Barcelona, Valencia, Granada, Salamanca, Bilbao y Málaga, citas para las que se pueden conseguir las entradas anticipadas en la web de Natos y Waor. Sin duda, marketing de guerrilla bien ejecutado.
El tercer bloque de la noche llegó cargado de sensaciones, momentos e invitados, muchos invitados. Por el escenario pasaron una nueva tanda de amigos (Fernandocosta, Naiara, Delaossa, Hoke, Denom…), dejando cada uno su impronta en forma de rima y su agradecimiento en forma de abrazo. Seguían las pantallas mostrano visuales sin parar, el fuego saliendo por los dispositivos situados en el escenario y las torres, los láseres iluminando el set y los presentes bailando, cantando y saltando como si fuese la última vez que lo hicieran. Por muy estudiada que llevasen la lección, Gonzalo y Fernando no eran conscientes de la perfección de un directo a la altura de las circunstancias, festejando de manera brutal sus quince años en activo.

Pero quedaba más para ofrecer, mucho más, la irrupción de una banda de rock formada por Deivhook (batería), Fabio Yanes (bajo) y Jack Stone (guitarra), quienes fueron el complemento perfecto a las rimas, en formato rock’n’roll, para la interpretación de ‘Más alcohol’, ‘Gato de callejón’, ‘Perro callejero’, ‘Quiero volar’ y ‘Sin ceros’, donde estuvieron acompañados nuevamente por amigos como el citado Recycled J, Miguel Campello, Walls y SFDK. Una nueva retahíla de agradecimientos por parte de los protagonistas, quienes vivieron una de las noches más exitosas de su carrera, quizás la más grande, antes de finiquitar el show con un trío de canciones marca de la casa como fueron ‘Bicho raro’, ‘Cicatrices’ y ‘Es como la cocaína’, cerrando su concierto más intenso hasta la fecha con un nuevo lanzamiento de llamas, tracas y fuegos artificiales. Sin duda, los mejores rapeando. Quedó completamente claro.
Texto: Alfredo Rodríguez
Fotografías: Alfredo Rodríguez