[Foo Fighters @ Barts. Barcelona. 16.09.2017]
[Promotor: Sony Music]
La noticia salió a la luz de manera inesperada, justo una semana antes del concierto, cuando la emisora de radio M80 anunció que los norteamericanos Foo Fighters ofrecerían un “secret show” en Barcelona para presentar su nuevo disco Concrete And Gold (Roswell Records/RCA Records, 2017) un día después de la salida del mismo. Para acceder a la ubicación, secreta hasta horas antes de su celebración, se pusieron en marcha dos concursos a través de los partners oficiales, la citada emisora y el diario El País, además de comprando el álbum en Fnac y en Amazon. Los fans incendiaron entonces Twitter e Instagram con sus particulares y peculiares fotos y vídeos, hashtag mediante, para tener la opción de presenciar y disfrutar de un acontecimiento único en todo el mundo y en nuestro país en particular. Tras seis días de tensión entre los #FooFans en las redes sociales, unos pocos elegidos fueron los seleccionados para vivir un show que se convirtió en histórico después de su celebración. Comenzaron los rumores sobre su ubicación, su duración y su formato, pero finalmente fue la sala BARTS (Barcelona Arts on Stage), el antiguo Gran Teatro Español, el edificio donde los seguidores, invitados y medios de comunicación presenciamos el espectacular concierto de casi tres horas de duración.
Siguiendo con la tónica de los rumores, se suponía que los californianos iban a presentar algunas de sus nuevas composiciones en un breve showcase, pero la cosa se alargó hasta bien pasada la media noche comenzando con el segundo corte de su primer largo homónimo Foo Fighters (Roswell Records/Capitol, 1995), ‘I’ll Stick Around’, continuando explosivamente con ‘All My Life’ y ‘Learn To Fly’. Cervezas volando, gente saltando, empujones, codazos y gritos en las primeras filas auguraban un gran concierto, como así fue. Turno entonces para uno de sus nuevos cortes, ‘The Sky Is A Neighborhood’, cuarto en su noveno trabajo publicado un día antes del show. Muchos aprovecharon para inmortalizar el momento con sus teléfonos móviles, otros simplemente miraban, pero fueron muchos los que corearon el estribillo “Oh my dear heaven is a big band now, gotta get to sleep somehow, bangin’ on the ceiling, bangin’ on the ceiling, keep it down’, celebrando el nuevo lanzamiento del sexteto. Seguido, otro momento de exaltación llegó con la interpretación de otro hit, ‘The Pretender’, mostrando el primer duelo de guitarras entre Dave Grohl y Chris Shiflett. La cita se convirtió en especial debido a sus características, pues su habitual puesta en escena se lleva a cabo en pabellones y arenas de todo el mundo y los principales festivales ejerciendo de cabezas de cartel, siempre ante miles de personas, por lo que poder disfrutar del show convirtió a unas mil personas en algo así como “las elegidas”.
‘La Dee Da’, ‘Dirty Water’, ‘The Line’, ‘Sunday Rain’ y ‘Run’ fueron otras de las nuevas canciones que interpretaron, siendo esta última la más intensa, celebrada y coreada por el respetable. En el apartado de los clásicos sonaron ‘My Hero’, ‘Monkey Wrench’, ‘Big Me’, ‘Best Of You’ y ‘Everlong’, teniendo también guiños de los Ramones (‘Blitzkrieg Bop’), Kiss (‘Rocket Ride’), Lenny Kravitz (‘Are You Gonna Go My Way’), The Knack (‘My Sharona’) y Queen (‘Another One Bites The Dust’) en una especia de popurrí mientras Dave bromeaba con Taylor Hawkins, instante que los presentes aprovechamos para coger un poco de aire después de tanta intensidad. Más de dos décadas en activo que se vieron resumidas en casi ciento ochenta minutos de rock and roll de estadio ante menos de mil espectadores, convirtiendo lo vivido en una noche memorable e inolvidable.
[Texto]: Alfredo Rodríguez
[Fotografías]: Alfredo Rodríguez