[The Boys @ Gruta 77. Madrid. 09.04.2011]
[Promotor: Gruta 77]
Nunca alcanzaron el éxito que cubrió de gloria a The Clash o Sex Pistols, pero mucho le debe la primigenia escena punk británica a este quinteto londinense (además de los mencionados, otros pilares como The Damned y Generation X grabaron algunos ensayos en el estudio casero/sótano del cantante Matt Dangerfield). The Boys fueron los primeros de esa hornada en dar cierta «credibilidad»” al punk, obteniendo un contrato para editar un LP y además giraron como teloneros de Ramones en una visita histórica por tierras británicas en 1980. Tras cerrar una etapa en el 82, «Los Chicos» regresaron en 1999 casi intactos, con un excepcional recambio en la batería: Vom Ritchie (actual Die Toten Hosen, leyendas del punk alemán e internacional y grandes admiradores de The Boys). A España volvieron hace 4 años y ahora tocaba nueva visita justo antes de embarcarse en una gira por Sudamérica. Cierta visceralidad reconocen los aficionados al punk más agrio en las grabaciones del grupo durante sus primeros años, pero su gran don es interpretar en vivo un set enérgico, empático y repleto de vibrantes momentos insuflados con rabia salina, que equilibran la balanza virada, en un extremo, por contagiosas melodías pop (fueron coronados como los Beatles del punk). Una lástima que el teclado de Stein ‘Casino Steel’ Groven pasara bastante desapercibido en el sonido global, pero hay que reconocer que los riffs y armonías del grupo se sustentan de maravilla durante el desarrollo de cada tema. También se mantuvo en segundo plano la excepcional guitarra de ‘Honest’ John Plain, prolífico guitarrista en el panorama musical británico. Por otro lado, un convulsionado Duncan ‘Kid’ Reid arañaba su bajo en el frontal del escenario al son de una danza infinita, brincando en torno a la figura de Matt Dangerfield -guitarra y voz principal-, demostrando ambos encontrarse en plena forma. Ningún «pero» ante el set interpretado: gran relevancia de su primer disco homónimo del 77 (‘Sick On You’, ‘I Don’t Care’, ‘Soda Pressing’, ‘No Money’ y, por supuesto, la más conocida, ‘First Time’) y presencia estelar de ‘Brickfield Nights’, ‘U.S.I’’, ‘Cast Of Thousands’ -incluidas en su segundo largo, Alternative Chartbusters (NEMS, 1978)- o de otros dos grandes himnos (más cercanos al sonido new wave de su última época) como ‘Weekend’ y ‘Poor Little Rich Girl’. Y así, en poco más de una hora, con dos escasos pero legendarios bises (‘Cop Cars’ y ‘Sick On You’) cumplieron aquella máxima que reza «lo bueno, si breve, dos veces bueno«.
[Texto]: Álvaro Martín Revuelta